En 1922 , la devoción que sentían los integrantes del Huesca era tal por el Barcelona que decidieron llevar los colores azulgranas como indumentaria, con la única diferencia que el pantalón era negro . A diferencia de la primera equipación, el cuello tiene forma de ‘V’ y no hay botones. El torneo lo jugaron los nuestros con camiseta de botones y con cuello para alcanzar los cuartos de final donde fue eliminada por la anfitriona tras un partido en Florencia que más en un encuentro de fútbol fue una batalla por la dureza del mismo.